La elección en Tlaquepaque ha sufrido sendos descalabros. Primero, la injerencia de la iglesia para evitar que la gente votara por MORENA y que de manera tácita benefició a Movimiento Ciudadano. Segundo, una aberración legal del Congreso de Jalisco, que dice legislar a favor de la paridad pero veladamente cierra el paso al candidato más competitivo de MORENA, que seguramente ganaría la elección extraordinaria. Tanto la fe católica como el movimiento de mujeres son instrumentalizados por un partido y por individuos que están dispuestos a violar los principios de la Doctrina Social de la Iglesia y la paridad sustantiva para conservar su poder reaccionario. A quien dañan no es a MORENA solamente, sino a sus comunidades de fe y a sus electorados. https://www.milenio.com/opinion/editoriales/debate-generacional-jalisco/elecciones-extraordinarias-en-tlaquepaque