Ir al contenido principal

El Soberano: Las balas y el recibo de luz

Al tiempo que se escribe esta columna, una delegación del gobierno mexicano encabezada por el Presidente Obrador se encuentra en Estados Unidos para asistir reunión tripartita entre México, Estados Unidos y Canadá. Generalmente estas reuniones son protocolarias y sirven para formalizar posiciones trabajadas previamente en materia de cooperación bilateral y trilateral. Esta frase se usa para nombrar exigencias de un lado y del otro de la frontera, en un intercambio en el que México siempre se encuentra en una posición desigual.

En semanas pasadas, el embajador Ken Salazar ha presionado al gobierno mexicano para que dé marcha atrás a la propuesta de reforma energética. Salazar, un abogado corporativo de formación y carrera, ha trabajado representando a empresas energéticas estadounidenses como Anadarko. Tiene un despacho de abogados corporativos de nombre “WilmerHale”, y aunque su biografía y participación han sido borradas del sitio oficial del despacho, su biografía profesional en otro sitio lo confirma. Su historia con Shell y British Petroleum (BP) son materia de una columna en sí misma.

El embajador Salazar, defensor de compañías privadas de petróleo y afín al fracking, representa intereses privados mediante su investidura pública. Este hecho poco conocido en México explica un poco el por qué la administración Biden ha dejado correr estas presiones. El lucro en Estados Unidos siempre ha encontrado protección oficial en su gobierno y estas presiones son solo la superficie. Habrá que poner especial atención a las agencias de cooperación estadounidenses y al financiamiento extranjero a ONG que procurarán influir en el proceso de aprobación de la reforma. Usualmente, lo más sombrío de estas presiones se mueve por debajo de la línea de flotación de la opinión pública.

La delegación de México habrá de enfrentarse a este interés, junto con el interés geopolítico de Estados Unidos de seguir acumulando vacunas para reactivar su economía, atraer turismo de vacunación y presionar a sus competidores rusos y chinos. Las peticiones que pueda realizar López-Gatell en este sentido deberán encontrar algún encadenamiento con los organismos internacionales. De lo contrario, como país no productor de vacunas, se exige desde una posición débil. No deberá haber pudor para hablar abiertamente de las vacunas ya aprobadas por México que Estados Unidos, Europa y la OMS bloquean por razones no científicas.

Por último, la demanda presentada ante los fabricantes de armas por parte del Estado mexicano podría encontrar algo de eco en la administración Biden. La regulación de armas de fuego como causa célebre y eslogan de los demócratas rara vez se acompaña de acciones fuertes. Sin embargo, la indolencia y la debilidad demócrata privilegia a los fabricantes de armas sobre cualquier otra cosa para no perder fuerza en distritos electorales conservadores.

México sufre las consecuencias de esa claudicación demócrata desde hace tiempo, pero las medidas siguen siendo tímidas. Las cortes determinarán el destino de la demanda que hace México, pero es urgente profundizar las medidas que ataquen las cadenas de suministro de armas. Si se logra, como se dijo el pasado 8 de octubre, extraditar a los primeros involucrados de Estados Unidos a México (y viceversa) por tráfico de armas y no por crímenes violentos solamente, habremos avanzado un eslabón más cerca de atacar las causas reales de la violencia en México.

Lo más leído de Rodrigo Cornejo:

Wikipolítica, Futuro y la acción comunicativa

El Futuro del partido político en México como acción comunicativa Durante años, fui parte de Wikipolítica en Guadalajara, Jalisco. Puedo afirmar que antes de tomar la decisión de devenir en partido político local, fuimos un gran experimento de qué tan lejos podía llegar en la política la acción comunicativa . Por ello, es necesario hacer un ajuste de cuentas con el pasado filosófico de nuestra organización para explicar la decisión que tomamos. Inicialmente, comenzamos a hacer política intentando responder a una amplia demanda de diálogo y de que la gente fuera tomada en cuenta. Esta fue nuestra apuesta: que la comunicación puesta al nivel de la estrategia política, podía ser competitiva ante el poder económico y la fuerza bruta que ejercen los partidos políticos. También, durante mucho tiempo estuvimos convencidos, por diversas razones, que la solución a los problemas políticos podía conseguirse mediante el consenso y la participación de las personas. Este convencimiento de q

Reseña: El rey viejo de Fernando Benítez

Es un azar. Los que nos eran leales nos traicionaron, los que fueron traidores pueden salvarnos. no sabemos ya nada de nada. — Extraño país el nuestro. — Es un país corrompido hasta la médula de los huesos -suspiró. Enrique a Carranza, en medio de su huída. El sueño y desencanto de un burócrata con aspiraciones de intelectual perfila muy bien el momento de quiebre que tal vez pasaron los secretarios de este nuevo régimen. Ellos, al igual que Enrique, el burócrata de El rey viejo, fueron violentamente atravesados por la crudeza de la política mexicana cuando creyeron que podían acceder a las glorias del gobierno y hacer historia sin penurias o dificultades. "No hay un gran mexicano que no sea o haya sido un fugitivo". No me simpatiza la causa legalista de Carranza pero la corta novela ayuda a forjar una extraña empatía del orden ante el caos de los mexicanos que no se cansaban de guerrear entre ellos, cambiando de bando conforme la necesidad, la codicia y